Propuesta del Presidente Correa en la Cumbre de UNASUR en Guyana
Los incentivos del Tratado de Kyoto (Japón) fueron insuficientes, ineficientes e injustos, porque el sistema premiaba a los países que reforestaban, pero impedían compensar a quienes no habían deforestado y contribuían a la absorción de CO2.
Se discute la posibilidad de pagar a los países en desarrollo por el valor del carbono almacenado en los bosques y así evitar la deforestación, con un atractivo financiero al modelo forestal sostenible, conocido como Emisiones Evitadas por Deforestación.
La idea de compensar la deforestación evitada es solo parte de un concepto más amplio que es compensar las emisiones netas evitadas.
Las emisiones netas evitadas, son las que pudiendo ser realizadas en la economía de cada país, no son emitidas o son reducidas.
El concepto pretende resolver el aparente dilema de qué compensar, pues tanto la reforestación como el bosque en pie ayudan a limpiar el medio ambiente y, según el concepto de emisiones netas evitadas, ambas, acción-omisión, deben ser compensadas.
Esta propuesta va mucho más allá, pues los países productores de combustibles fósiles altamente contaminantes tendrían la opción de elegir entre extraer esos recursos o dejarlos en el subsuelo y ser compensados por las emisiones evitadas.Asimismo si se amplían los incentivos de Kyoto hacia las emisiones netas evitadas, se podría dar un giro revolucionario en los intercambios internacionales, al permitir convertir a muchos países, de economías extractivistas a exportadores de servicios ambientales.